Tras el éxitodeNo siento nada,Strömquist se adentra en el tema actualmente: la dictadura de la imagen en la era Instagram
«Una autora imperdible».
Elle
«Cáustica y letrada».
El País
¿Nos estamos convirtiendo en la madrastra de Blancanieves? En la era Instagram, nuestro espejo mágico es la pantalla y la hermosura la dictaminan los likes. En La salón de los espéculos, Liv Strömquist se pregunta hasta qué punto la dictadura de la imagen ha minado la relación con nuestros cuerpos.
Siempre y en todo momento ácida e irreverente, la autora nos lleva del mito bíblico de Jacob hasta los motivos del éxito de influencers como Kylie Jenner o Kim Kardashian, pasando por la última sesión de fotografías de Marilyn Monroe, la obsesión de la princesa Sissi por el ejercicio físico o el hurto del busto de Nefertiti.
Strömquist nos regala un libro intensamente documentado en el que nos acompañan su trazo inimitable y las teorías de Susan Sontag o Eva Illouz para desentrañar el canon que nos esclaviza e intentar localizar algo real entre tanto filtro.
La crítica ha dicho:
«Strömquist nos regala un trabajo creado en la independencia mucho más absoluta, que expande las opciones del cómic como herramienta para tratar cualquier tema sin ningún complejo ni atadura. Una obra que nos sirve para comprender bastante superior la relación de la imagen que proyectamos con el mundo en el que vivimos que debería ser una lectura de cabecera para alguno y consolida a su autora como un líder ineludible del medio».
Diego García Rouco,Región Negativa
«Ácida e irreverente».
Javier Velasco Oliaga,Todo Literatura
«Gracias a su amplia cultura, el trazo de su lápiz y su destreza para contar historias, Liv Strömquist logra que la lectura de los clásicos de la filosofía, las humanidades y las sociología resulte fluida e incluso amena».
L’Éclaireur
«Liv Strömquist bosqueja nuestras obsesiones».
LeTemps
«Como es habitual, la dibujante sueca ha estudiado las teorías de filósofos, historiadores y sociólogos para después cocinarlos a su forma, repleta de humor y de cultura pop. El resultado es un cómic lúdico, formalmente muy libre -algunas viñetas son silenciosas, otras rebosan de artículo-, apoyado en fuentes científicas específicas y en ejemplos muy contrastados».
LeFigaró, secciónMadame
«La prolífica dibujante feminista sueca vuelve con su nuevo cómic:La salón de los espéculos […]. Esta vez, esta autora feroz y impresionante que entrelaza filosofía, historia, sociología y cultura pop, arremete contra los mitos de la hermosura femenina y los mandatos sociales que derivan de ellos y piensa sobre los vínculos que unen la imagen privada con la pública. Una autora imperdible».
Marie Claire
SobreNo siento nada:
«Strömquist torpedea las construcciones sociales».
El Mundo
«DeGirlsa Emily Dickinson o de DiCaprio a Sócrates, [Strömquist] mezcla a conocidos con líderes culturales y del pensamiento [para]acercar ideas al público general».
Ana Fernández Abad,SMODA – El País
«En esta era tardocapitalista dónde consumimos parejas y no edificamos deseo, déjate de hostias, mira a los ojos, di cursiladas, olvídate de las fiestas a las que no te invitan, canta a Barbra Streisand y ¡¡ama, ama, ama!!».
Isabel Calderón y Lucía Lijtmaer