La luz blanca es un remedio divino para el alma, fortalece el corazón y aclara la cabeza. Al contener todas y cada una de las frecuencias de color que requerimos para sanar –a nosotros mismos, a el resto, pero también al mundo y a todo cuanto vive–, la luz blanca nos prepara para convertirnos en canales espirituales. Le da los medios precisos a nuestra alma para poner fi n a nuestros pensamientos y comportamientos negativos, para que tengamos la posibilidad ser mucho más fuertes y mucho más sabios, para cumplir nuestro destino y manifestar nuestra verdad interior. En este cofre, las imágenes luminosas y visionarias de A. Andrew Gonzalez se asocian con los mensajes aclaradores y las prácticas sanadoras de Alana Fairchild, para ayudar a tu alma a absorber los antídotos de amor de la luz blanca. Comienza tu viaje con confi anza y disfruta de la belleza del camino que te espera…