Los que practican esta curiosa actividad conocen las reglas: romper el hielo, echar un polvo y despedirse. No esperan salir de allí con una relación. Es lo que hay.
Dylan Sparks conoce esas reglas. Está familiarizada con el protocolo. Y tiene el mejor sexo de su historia con un completo irreconocible en la boda de su exnovio.
A Reese Carroll no le importan las reglas. Quiere algo más que una noche con Dylan. Y Dylan lo halla demasiado adictivo como para que él salga de su historia sin más.
Dulce adicción es la narración de la pelea de una mujer por procurar que todo sea casual, pese a lo que le dicta el corazón, y del deseo de un hombre de estar a su lado.