La poesía de Friederike Mayröcker se constituye de hermosas evocaciones de imágenes de la infancia y de imágenes del amor pasando por juegos con las palabras, estructuras en eco, desplazamientos asociativos, cruces de significaciones y amalgamas sembradas de ironía, supresión de partes de la frase, montajes de frases contradictorias, correspondencias de pasado y presente, de recuerdos de infancia y de edad madura, súplicas, citas, ocurrencias, notas, falsas lecturas, contenidos escritos errados etc. El poema libre o total al que aspiro es mi iniciativa de un poema que aporta un corte de la integridad de mi conciencia del mundo. Entendiendo planeta como algo plural, denso, fragmentario, indisoluble, afirma la propia autora de su obra cretiva. Quien lee contenidos escritos de Friederike Mayröcker hay que entregar, pues, a ellos y seguir sus movimientos, sin preguntar enseguida por el sentido y el mensaje. La significación aparece de los sonidos y para cada lector se da, si es abierto y sabe oír, una significación propia. Es una escritura que consume y recrea, recoge y amenaza, causa mal y prolonga alegría. Una experiencia literaria de primer orden, sin dudas, que hacía demasiado tiempo puesto que se nos escamoteaba.