Vivir, querer, espíritu libre, alumbrar, avisar a Jesús vivo… ¡ese es el espíritu del santo de copas! El planeta necesita de esos cristianos. Los cristianos debemos llegar con y por nuestros amigos hasta las puertas del infierno; más allí no, por el hecho de que en el infierno no es posible querer a Dios. El templo de los cristianos —el lugar donde podemos encontrar y llevamos a Dios— es la calle; el templo de los cristianos son también los sitios de fiesta. El planeta necesita jóvenes santos… santos en bermudas y chanclas; santos en escenarios de música; santos muy normales; santos con gusto; santos con piercing; santos disfrutones; santos soñadores; santos comprometidos con los marginados; santos que adoran a sus perros; santos demandando en la calle independencia; santos divertidos; santos con ternura; santos de Erasmus; santas en biquini; santos de fiesta; santos que se ríen de los estereotipos; santos de estudio; santos con tatuajes; santos con una cantidad enorme de seguidores en Facebook; santos en las canchas; santas presumidas; santos contentísimos de vivir; … santos de copas.