Por vez primera en la crónica de la raza humana, en el planeta actual existen condiciones para eliminar la pobreza. Y, sin embargo, más de mil miles de individuos viven cada día con menos dinero del que cuesta comprar una botella de agua. Dada esta situación absurda e inaceptable (más inaceptable aun pues es posible resolverla), Peter Singer emplea, con su habitual claridad, fuertes argumentos éticos para mostrar que nuestra respuesta actual a la pobreza mundial no solo es insuficiente sino asimismo éticamente condenable. Pero, aparte de argumentar por qué esta conducta debe alterarse, ofrece resoluciones específicas y fáciles para conseguirlo.De qué manera salvar una vida nos enseña a ser parte de la solución de entre los defectos morales más cuestionables de todo el mundo contemporáneo, prestando asistencia a otros mientras nos asistimos a nosotros mismos. Un refulgente manifiesto que está cambiando la vida real de una cantidad enorme de personas en el planeta.