Primera novela policial de Roberto Ampuero en la que muestra al detective cubano Cayetano Brule.
Cayetano Brule es un detective privado y está orgulloso de serlo. Tiene pasaporte norteamericano, pero nació en Cuba y radica en Valparaíso.
Aunque generalmente sólo se ha destinado a casos modestos -infidelidades, seguimientos y latrocinios-, un día todo cambia: un adinerado hombre de negocios lo contrata a fin de que averigüe la realidad sobre la muerte de su hijo, Cristián Kustermann, asesinado de repente. Pero no hay responsables ni sospechosos, sólo comentarios que se pierden en el oceano Pacífico de Chile.
Detrás de la muerte de Cristián Kustermann, el detective se encontrará de bruces con una red subversiva con nexos en la antigua Alemania Oriental y en la Cuba de Fidel Castro.
Esta novela policial -Premio Gaceta de Libros de El Mercurio- es el exitoso inicio de las aventuras del detective Cayetano Brule.