Pero en la esencia de la práctica meditativa budista late una promesa radical: que es viable estudiar a sentir el planeta, incluidos nosotros, con mayor claridad y conseguir de esta manera una felicidad profunda y sostenible.
Basándose en los estudios de neurociencia y psicología más vanguardistas, y respaldado por su aguda entendimiento de la evolución humana, Robert Wright enseña por qué razón el camino budista que lleva a la realidad y a la transformación interior es exactamente el mismo que lleva a la alegría.
Este libro innovador conjuga el rigor científco con la sabiduría espiritual y la entendimiento de la cabeza humana, y nos enseña una exclusiva manera de vivir libres de las garras de la ansiedad, la culpa y el odio.