¡Que las mujeres no se expongan en lo más mínimo, en las altas montañas, a las fatigas, a los riesgos extraños a su sexo, a lo que podría ser censurable! La timidez, el vahído, son en ellas cosas naturales, de manera frecuente graciosas y afables. Que dejen, pues, ese bastón de punta de hierro que, en sus manos, es vano y absurdo…, abogaba en 1828 Étienne-Gabriel Arbanère, en su Cuadro de los Pirineos franceses. Afortunadamente, no fue escuchado. Mujeres y montañas. Nacimiento del Pirineísmo femenino, libro ganador ex- aequo del IV Premio Desnivel de Literatura de Montaña, Viajes y Aventura, proporciona un apasionante testimonio de la curiosidad, determinación y deseo de autosuperación de las primeras pirineístas. Compuesto de siete narraciones noveladas, situadas entre 1792 y 1858, reconstruye de una manera muy convincente las experiencias de las vanguardistas en el montañismo pirenaico. Desde Rosalie Ramond hasta Alice Prévost, diversas circunstancias personales e históricas, a veces muy tráficas, han empujado a estos seres vibrantes con conmuevas a aventurarse por lugares entonces muy poco explorados: el Pico de Entre los Puertos, el Pic du Midi de Bigorre, la Hourquette dOssoue, la Brecha de Rolando, el Monte Perdido, el Vignemale, el Aneto. Una montañera, una cima, unas experiencias… El resultado es una narración intimista y personal, donde el esfuerzo de reconstrucción ha sido tan riguroso como el de documentación. Marta Iturralde hace gala de su sensibilidad y experiencia montañera para transmitirnos su visión de aquellas históricas ascensiones.