¿De qué forma sobrevive la gente en situaciones de opresión? ¿Qué vuelve posible una revolución? En tiempos en que el poderoso ejerce un férreo control sobre el comportamiento del resto, ¿tiene sentido la resistencia? Este ensayo ofrece una perspectiva original en el estudio de las relaciones de poder. Para esto, toma como punto de inicio un hecho incuestionable: los actores de la vida social y política no dismuyen sus intervenciones al escenario público. Más allá de las formas visibles de hegemonía, el autor propone discernir las prácticas cotidianas que se realizan detrás de la tribuna pública. Así, presta atención no a los discursos oficiales, sino más bien a los procedimientos de encubrimiento lingüístico, los códigos ocultos, el aprovechamiento del anonimato y la ambigüedad intencional, para descifrar lo que llama el arte de la resistencia. Este libro está considerado como entre las mayores aportaciones teóricas al debate sobre la relación dominador-dominado, tanto es conque ciertos analistas han afirmado que tras este trabajo los movimientos sociales debieron volver a pensar su estrategia.