Licor De Mandragora

Nicolás, en la mitad de la crisis de su matrimonio, da un paso por fuera, enamorándose perdidamente de Herminia, compañera de trabajo, veinte años mucho más joven que él, mujer de corte intelectual e inexperta en el amor. Matilde, esposa de Nicolás, con algún indicio de la infidelidad, logra trasladarlo del otro lado del Atlántico, influyendo en el presidente de la compañía donde trabaja su marido, y quien en el pasado fue su apasionado. Se desarrolla un febril idilio matizado con la distancia impuesta. En la mitad de la toma de las complicadas resoluciones de divorcio, hay una pequeña hija. Un pordiosero alienta el idilio y da un tono reflexivo.