Lebrón lo tenía todo controlado. Era un hombre de éxito empresarial, venía de una familia noble y vigorosa de Barcelona, y tenía una prometida que todos admiraban. Hasta el momento en que una noche, tras la de despedida de soltero de su mejor amigo, conoce a una mujer que lúcida algo en él que no sabía que tenía. Para colmo, al llegar a su casa, revela a su prometida acostándose con otro, un hombre que era competencia directa de su sector. Lebron sufre un revés importante que le va a hacer replantearse su historia y, más que nada, descubrirse a sí mismo, para comprender que, es posible que su historia impecable no era lo que él quería y que, lo que él quería, vendría en la forma menos esperada.Diana siempre y en todo momento tuvo las cosas clarísimas. Sabía que quería ser emprendedora y ganarse la vida desde joven, que no quería relaciones pues pocos podrían satisfacerla en los ámbitos que ella solicitaba y que el sexo debía ser todo lo salvaje y osado que cada uno estuviera presto a presenciar. No quería ataduras excepto las que ella realizaba.Pero, conoció a Lebrón. Y Lebrón le propuso algo que juró que no volvería a hacer.Con su sentido del humor aplastante, y su aptitud para crear historias de amor con tramas muy auténticos donde la sensualidad y el erotismo van de la mano de la emocionalidad y la sensibilidad, Lena Valenti nos regala esta historia sobre nuestros deseos y nuestra naturaleza, y sobre la necesidad de deconstruirnos sin temores para admitir que, antes de querer a otros, debemos aprender a querernos a nosotros tal y como somos y atrevernos a expresar lo que queremos.