Pilar Castro, El Cultural, El Planeta
«Una excelente novela policiaca.»
Ernesto Ayala-Dip, El Correo
«Domingo Villar se confirma con La playa de los ahogados como un excelente escritor.»
Rosa Mora, Babelia, El País
Una mañana, el cadáver de un marinero es arrastrado por la marea hasta la orilla de una playa gallega. Si no tuviera las manos atadas, Justo Castelo sería otro de los hijos del mar que encontró su tumba entre las aguas mientras que faenaba. Sin testigos ni rastro de la embarcación del fallecido, el lacónico inspector Leo Caldas se sumerge en el ámbito marinero del pueblo, intentando de esclarecer el delito entre hombres y mujeres que se resisten a revelar sus supones y que, en el momento en que se deciden a hablar, apuntan en una dirección bastante insólita. Un tema nubloso para Caldas, que atraviesa días difíciles: el único hermano de su padre está dificultosamente enfermo y su colaboración radiofónica en Onda Vigo se está volviendo molesto. Tampoco posibilita las cosas el carácter impulsivo de Rafael Estévez, su ayudante aragonés, que no acaba de amoldarse a la manera de ser del inspector.