Las tramas de Manzini y la humanidad desbordante de su personaje, convirtieron las historias de Schiavone en un éxito sin precedentes en Italia.
Forzado a abandonar su querida Roma natal debido a ciertas irregularidades en el desempeño de su tarea policial, Rocco Schiavone es enviado al valle de Aosta, que pese a estar ubicado en la península Itálica, para un meridional como él es lo mucho más similar a arribar en Marte. Cubierto de imponentes montañas, atenazado por un frío glacial y desconcertado ante el carácter circunspecto de los pobladores del sitio, Rocco enfrenta su segundo caso con exactamente el mismo talante de siempre y en todo momento, irritable y transgresor hasta el límite de lo permisible, pero imbuido de un profundo sentido de la justicia.
Cuando una mujer es hallada fallecida en su casa y, en la penumbra, se alargan las secuelas de lo que en fachada ha sido un robo violento, el subjefe Schiavone se resiste a la tentación de opinar lo evidente. Una serie de coincidencias y divergencias, sumadas a la ambigüedad de algunos personajes, transformará gradualmente el ámbito del delito en una espesa niebla de secretos. Para despejarla, Schiavone pondrá en práctica su contundente procedimiento especial, apoyado en la intuición, la astucia, una inexpugnable lealtad a su gente de confianza y cierta tendencia a tomarse la justicia por su mano.
Como ya se vislumbró en Pista negra, su primer caso, cada interrogatorio de Schiavone, espoleado por su característico mal humor y su irreductible perserverancia, despierta la curiosidad del lector. De esta manera, la cohesión geométrica de las tramas de Manzini y el desasosiego de su personaje, de una humanidad desbordante, convirtieron las historias de Schiavone en un éxito sin precedentes en Italia, un fenómeno que va sendero de extenderse a todo el continente europeo.
La crítica ha dicho…
«En sólo dos novelas, Antonio Manzini hizo del subjefe de policía Rocco Schiavone un personaje inolvidable y que crea adicción.»
Corriere della Sera
«Antonio Manzini ha dibujado un personaje extraordinario.»
Andrea Camilleri
«Lo confieso: cuando comencé la novela, no pude dejarla hasta haberlaterminado. En más de una ocasión creí que había descubierto al asesino, pero se encontraba equivocada.»
La Repubblica
«Un felizretornoa la nieve. Más bien un eslalon que un descenso online recta, pero sin perder de vista nunca la misión.»
La Stampa
«Entrañables y escritas con un enorme sentido del ritmo, las novelas de Manzini se leen de un tirón.»
Il Piccolo