«Joyland es un libro increíble, hermoso, desgarrador. Tiene secreto, tiene atracciones; es una historia sobre madurar y hacerse mayor, y sobre aquellos que no pueden hacer ninguna de las dos cosas pues la muerte viene a porellos antes de hora. Hasta los que leen más insensibles se emocionarán.»
Charles Ardal, editor de Hard Case Crime
Verano de 1973. Carolina del Norte. El joven universitario Devin Jones consigue trabajo en un pequeño parque temático llamado Joyland. Allí se hace cargo de las tareas de mantenimiento, se disfraza de la mascota del parque o entretiene a los pequeños. Y allí revela asimismo la crónica de un cruento delito que tuvo lugar en la Casa Hechizada y que nunca fue resuelto.
Pero Devin no es el único fascinado por el parque y su leyenda negra. Cerca de su pensión vive Mike, un chico enfermizo con el que próximamente traba una peculiar amistad. El chaval no ha visitado nunca Joyland y le encantaría hacerlo antes de morir. Es entonces en el momento en que Devin tiene planeado una visita privada para el final de temporada.
El día avanza entre montañas rusas e historias de terror sobre lo que ha podido haberle pasado a la joven asesinada. No obstante, las visitas indeseadas y las cuestiones indiscretas pueden provocar reacciones indecifrables. Sin saberlo, Devin se metió en un arriesgado juego del que tal vez no saldrá nunca.
