Lesiones sin patria es una confesión y un manifiesto, una lectura íntima y transparente. Y es precisa. Andrea escribe sobre amor y depresión, sobre trastornos de nutrición y ansiedad, sobre racismo y la experiencia de ser adoptada, sobre deconstrucción y relaciones íntimas. Es la voz de un individuo a quien se le escapa la poesía en el momento en que cuenta lo que siente, el testimonio de alguien que vive con todas las consecuencias. Es un libro incómodo de leer pero importante de percibir, y también ignorarlo sería fácil, pero asimismo una catástrofe. Andrea halla la forma de sincerarse salvajemente, de romperse y reconstruirse en todos y cada página, de realizar de un trabajo sensible que pocos se animan a enfrentar, una obra maestra. Sus expresiones arrasan, conmueven, duelen, pero más que nada, te cuidan. Esta es una obra que acompaña a su lector, que no te deja sola, y no es hasta el momento en que acabas de leerla que entiendes hasta qué punto es un obsequio. Caetana Lombardía.