Es viable mudar, en cualquier momento de la vida, nuestras ideas mucho más arraigadas, nuestra forma de meditar y asimismo nuestra experiencia sensible. Para conseguirlo es bastante una herramienta sencilla y extremadamente efectiva en la transformación de nuestro cerebro: el buen uso de la charla.
Nuestra mente es mucho más maleable de lo que suponemos y, más allá de que conservamos toda la vida exactamente la misma capacidad de estudiar que contamos de chicos, con el tiempo vamos perdiendo la necesidad y la motivación para hacerlo. De esta manera, comenzamos a convencernos de lo que no tenemos la posibilidad de: o somos malos para la matemática, o no nacimos para la música, o no tenemos la posibilidad de conducir nuestra furia, o nos es imposible sobrepasar el temor. Este libro sostiene y demuestra que, con independencia del momento de nuestra vida que atravesemos, tenemos la posibilidad de demoler esas opiniones y mudar ideas y sentimientos, aun esos mucho más intensamente arraigados, aprendiendo a conversar. En efecto, la charla -con otros y con nosotros- es la herramienta mucho más excepcional para editar nuestra vida.
Tras el éxito mundial de La vida segrega de la mente, Mariano Sigman reúne los adelantos mucho más recientes de la neurociencia y los combina con historias de vida y una dosis importante de humor para explicar cómo y por qué las buenas diálogos mejoran nuestras decisiones, ideas, memoria y emociones. Hete aquí un poder que está a nuestro alcance y tenemos la posibilidad de emplear para mudar nuestra mente y tener una vida mejor: el poder de las expresiones.
