«El enorme arte» desarrolla una impresionante variedad de tramas en torno al crimen de mujeres a las que su asesino redacta con un cuchillo una P en el rostro.
Citando a Arquílocos de Paros, «tengo un gran arte, hiero fuertemente a esos que me hieren», y con el interrogante de si -en una sociedad donde los capaces de defenderse por sí solos son los que sobreviven- el gran arte es el de matar, Rubem Fonseca mezcla la constante alusión a los modelos tradicionales y el manejo de referentes de la «alta cultura» con la utilización de la novela negra y con guiños nada casuales a los medios y a la civilización de masas. Mediante una trama de ritmo vibrante y con economía de medios expresivos, Rubem Fonseca ha escrito una novela que encanta y también hipnotiza y que opera como un fresco de la sociedad contemporánea.
Citando a Arquílocos de Paros, «tengo un gran arte, hiero fuertemente a esos que me hieren», y con el interrogante de si -en una sociedad donde los capaces de defenderse por sí solos son los que sobreviven- el gran arte es el de matar, Rubem Fonseca mezcla la constante alusión a los modelos tradicionales y el manejo de referentes de la «alta cultura» con la utilización de la novela negra y con guiños nada casuales a los medios y a la civilización de masas. Mediante una trama de ritmo vibrante y con economía de medios expresivos, Rubem Fonseca ha escrito una novela que encanta y también hipnotiza y que opera como un fresco de la sociedad contemporánea.
