«De Como Un Rey Perdió Francia» nos transporta a la Francia del siglo XIV, una nación sumida en una profunda crisis social y económica. El reinado de Juan II, el «Rey Bueno», es un periodo marcado por la decadencia, la opresión y la ineficacia. La nobleza, deslumbrada por el lujo y la búsqueda de privilegios, desprecia al rey, mientras que la clase trabajadora sufre bajo el peso de los impuestos y las exenciones que favorecen a la aristocracia. El país está dividido por facciones rivales, enfrentados por el control de tierras, títulos y cargos públicos. La peste, conocida como «La Gran Peste Negra», asola el país, diezmando a la población y sembrando el pánico y la desesperación. El monarca, un hombre vanidoso y cruel, pero también indeciso y capaz de tomar decisiones erróneas, se debate entre la necesidad de hacer frente a los desafíos externos e internos, y su propia incapacidad para liderar eficazmente.
La novela se centra principalmente en la preparación y el desarrollo de la Batalla de Poitiers (1356), un episodio crucial de la Guerra de los Cien Años. El rey Juan II, influenciado por el joven y ambicioso Bertrand du Guesclin, decide enfrentarse al ejército inglés, liderado por el Príncipe Negro. Sin embargo, la estrategia de combate es cuestionada por consejeros más prudentes, lo que demuestra la indecisión y la falta de liderazgo del rey. La batalla en sí es retratada con un detalle realista y brutal, mostrando el caos, la confusión y la desesperación de ambos bandos. La derrota de la batalla de Poitiers, en la que Juan II es capturado, marca un punto de inflexión en la guerra y un golpe devastador para la moral francesa. Pero más allá de la batalla, el libro explora la vida cotidiana de la época, desde los salones de la nobleza hasta los barrios más bajos de París, mostrando la riqueza y la pobreza, la esperanza y la desesperación que coexistían en la Francia del siglo XIV.
La novela comienza con una descripción detallada de la situación política y económica de Francia a principios del reinado de Juan II. Se examinan las intrigas palaciegas, las disputas entre los consejeros del rey y la creciente desconfianza del monarca hacia sus súbditos. Se muestra la corrupción endémica que asola la administración real y la forma en que esta se aprovecha de la pobreza del pueblo para mantener su poder. El libro ilustra cómo la incapacidad de Juan II para controlar a sus nobles y para reformar las instituciones de su reino conduce a un estado de anarquía y confusión. La peste negra, con su devastadora marcha por Francia, agrava la situación, provocando hambrunas, desplazamientos de población y desmoralización generalizada.
El libro narra la toma de decisiones sobre la estrategia militar y la preparación para la batalla de Poitiers. Druon presenta a Bertran du Guesclin, el líder militar francés, como un hombre de gran talento y visión, que intenta, en vano, persuadir al rey de la necesidad de adoptar un enfoque más racional y eficaz. El rey, obsesionado con su propio prestigio y con la necesidad de demostrar su valentía, se deja llevar por la opinión de sus cortesanos, lo que demuestra su falta de juicio y liderazgo. La batalla de Poitiers es descrita con un detalle gráfico y realista, mostrando la brutalidad de la guerra medieval, la desorganización de los ejércitos, la disposición de las tropas y las tácticas utilizadas por ambos bandos. La captura del rey Juan II por el Príncipe Negro es el clímax de la batalla y un evento trágico que tendrá consecuencias devastadoras para Francia.
Opinión Crítica de De Como Un Rey Perdió Francia (Los Reyes Malditos 7)
“De Como Un Rey Perdió Francia” es, sin duda, uno de los mejores volúmenes de la serie «Los Reyes Malditos» de Maurice Druon. Aunque más sombría y pesimista que otros de los libros, ofrece una visión veraz y convincente de un periodo crucial en la historia de Francia. Druon no idealiza al rey Juan II, sino que lo presenta como un hombre débil, indeciso y despreocupado, que contribuyó a la decadencia de su reino. El autor realiza un trabajo notable en la recreación de la atmósfera de la época, mostrando las dificultades económicas, las tensiones sociales y las diferencias culturales que caracterizaban la Francia del siglo XIV. La novela es un recordatorio de que, incluso los reyes más poderosos, pueden ser derrotados por sus propias debilidades y por la falta de liderazgo.
La batalla de Poitiers se describe de forma espectacular, transmitiendo la confusión, el miedo y la desesperación que sufrieron los soldados franceses. Es importante destacar que Druon no presenta la batalla como una simple victoria o derrota, sino que la muestra como un evento complejo, marcado por la táctica, la moral y el suerte. El personaje de Bertran du Guesclin se erige como un faro de esperanza en un reino sumido en el caos, y su lucha por mantener la independencia francesa es un testimonio del coraje y la determinación del pueblo francés. “De Como Un Rey Perdió Francia” es un libro imprescindible para cualquier persona interesada en la historia de Francia o en las sagas históricas en general, y una obra que demuestra el genio de Maurice Druon.


