Este creador llamó crítica a su doctrina. Su empeño fue educar a filosofar, no trasmitir los principios de una filosofía hecha. «Crítica» significa apreciación justa, más que nada apreciación de las opciones del hombre como creador y sostenedor de la civilización. La terea de la crítica es, a la vez, negativa y efectiva. Tocante a la razón humana, hace ver sus restricciones, pero, al propiio tiempo, en estas, garantiza su obra posible y creadora.
Los objetivos que se propone Crítica de la razón pura giran en torno a las siguientes preguntas: en que radica la validez del conocimiento científico; Cuáles son los límites de tal comprender, y , por tanta, por qué no es posible la metafísica tradicional como la ciencia; cómo es posible el verdadero conocimiento filosófico.