«Cola Mala» de Jaime Cosío, publicado por Planeta, es una novela que irrumpe con fuerza en el panorama literario contemporáneo, abordando temas complejos y a menudo incómodos con una honestidad brutal y un humor incisivo. La obra se erige como un retrato poderoso de la adolescencia en el siglo XXI, explorando las tensiones entre la identidad sexual, las expectativas sociales y las exigencias familiares. La historia, narrada en primera persona, nos sumerge en la vida de un joven, Rey, que lucha por encontrar su lugar en un mundo que lo rechaza y lo confunde. Cosío no solo nos ofrece una crónica personal, sino que plantea preguntas cruciales sobre la aceptación, la discriminación y la búsqueda de la autenticidad, convirtiendo a Rey en un personaje entrañable, a pesar de sus contradicciones y errores. La novela es un testimonio de las heridas que la sociedad puede infligir y, al mismo tiempo, una invitación a la reflexión sobre la necesidad de construir un mundo más tolerante y comprensivo.
La novela destaca por su valentía al abordar temas tabú y por la forma en que equilibra la crudeza de las experiencias de Rey con momentos de humor negro y una prosa elegante. Cosío utiliza la narración en primera persona para crear una intimidad profunda con el lector, permitiéndonos sentir las frustraciones, los deseos y las dudas de Rey. A través de la experiencia del protagonista, se critica implícitamente las estructuras sociales y las actitudes preconcebidas que perpetúan la exclusión y el prejuicio. «Cola Mala» es más que una novela; es un espejo que refleja las inquietudes de una generación y un llamado a la acción para construir un futuro más inclusivo.
La historia comienza en Santiago de Chile, donde Rey, un estudiante de diseño gráfico con una fuerte personalidad, se encuentra atrapado en un limbo de frustración y confusión. Su vida cotidiana está marcada por el bullying de sus compañeros, quienes lo tachan de «muy cola» y lo reducen a estereotipos homófobos. Esta situación se agrava por la actitud conservadora de su familia, quienes le exigen comportarse como un “hombre” y, en general, lo desaprueban por ser diferente. Rey se siente aislado y desorientado, incapaz de entender por qué sufre tanto y, sobre todo, no comprende su propia atracción por los hombres.
A medida que la novela avanza, la desesperación de Rey lo lleva a tomar decisiones drásticas. Harto de ser un objeto de burla y de la imposición familiar, decide escaparse de su hogar y buscar refugio en la capital. Su viaje lo lleva a un mundo de bares, discotecas y, crucialmente, a través de la aplicación de Grindr, donde conoce a hombres que se sienten atraídos por él. Estos encuentros sexuales, inicialmente impulsivos y descontrolados, se convierten en una forma de intentar llenar el vacío que siente y de explorar su sexualidad. Sin embargo, la realidad de estos encuentros es a menudo ambigua y desilusionante, y Rey se da cuenta de que no hay una solución fácil a sus problemas. Más allá de la búsqueda de placer físico, su viaje se convierte en una búsqueda de identidad, un intento de comprender quién es y qué quiere de la vida.
La investigación de su pasado familiar, desencadenada por un secreto que se revela, añade otra capa de complejidad a la historia. Rey descubre que su familia está involucrada en una red de mentiras y secretos que se remonta a generaciones atrás, lo que pone en tela de juicio toda la identidad que ha construido. Este secreto, relacionado con una figura paterna oscura y controvertida, revela que sus problemas no son solo el resultado del rechazo social, sino también de una herencia familiar compleja y dolorosa. La revelación lo confronta con la necesidad de confrontar el pasado y, por tanto, de reclamar su propia vida. Este elemento añade un componente de suspense y de thriller psicológico a la novela, manteniendo al lector enganchado a la trama.
La novela se estructura en torno a dos líneas narrativas principales: la búsqueda de identidad de Rey y la revelación de un secreto familiar. La primera se desarrolla a través de sus experiencias en Santiago, donde lidia con el bullying y la imposición familiar, y a través de sus encuentros con hombres en Grindr, que le permiten explorar su sexualidad y, al mismo tiempo, se sienten como una pérdida de control. Rey se ve obligado a tomar decisiones impulsivas que, en un principio, le dan una sensación de libertad, pero que luego se revelan como errores y consecuencias negativas. A medida que la trama avanza, Rey se vuelve cada vez más dependiente de estos encuentros, llegando a una situación crítica que pone en riesgo su seguridad.
El descubrimiento del secreto familiar es un punto de inflexión en la historia. La investigación sobre su padre, un hombre que siempre ha estado ausente y que se ha mantenido en el margen de su vida, desvela una historia de traición, engaño y manipulación. La revelación del pasado familiar no solo explica por qué Rey se siente tan incómodo y desorientado, sino que también le proporciona una nueva perspectiva sobre su presente. A través de este conocimiento, Rey se da cuenta de que su problema no es solo una cuestión de «ser diferente», sino también de lidiar con un legado familiar tóxico que ha moldeado su personalidad y sus relaciones. La novela explora la idea de que el pasado puede tener un impacto duradero en el presente y que es importante confrontarlo para poder seguir adelante.
A medida que Rey se adentra cada vez más en la investigación, se da cuenta de que el secreto familiar no solo lo afecta a él, sino que también está relacionado con otras personas de su vida, lo que complica aún más la trama. Se convierte en un personaje en una red de mentiras y engaños, y debe aprender a confiar en su instinto y en sus amigos para poder desenredar la verdad. La novela utiliza el suspense para mantener al lector en tensión, revelando información gradualmente y planteando preguntas sin respuesta. Al final, Rey logra confrontar a su padre y a los responsables del secreto, y logra dejar atrás el pasado para poder construir un futuro más auténtico.
Opinión Crítica de Cola Mala
«Cola Mala» es una novela excepcional que merece ser leída y reflexionada. Cosío ha logrado crear un personaje complejo y entrañable, con quien el lector puede identificarse y empatizar, incluso cuando sus acciones son cuestionables. Rey es un joven vulnerable y en crisis, que se enfrenta a un mundo que no lo comprende y que le rechaza, y su lucha es, en muchos sentidos, universal. La forma en que Cosío explora temas como el rechazo social, la identidad sexual, y la familia es innovadora y provocadora.
La novela no rehúye las complejidades de la sexualidad adolescente, abordando temas como el consumo de drogas y el deseo irreflexivo con una honestidad brutal que puede resultar incómoda para algunos lectores. No obstante, esta crudeza no es gratuita; es una forma de reflejar la realidad de la vida de un joven que se siente atrapado en un mundo de contradicciones y que se niega a ser juzgado por sus errores. Cosío logra equilibrar la crudeza de la narrativa con momentos de humor negro y con una prosa elegante y cuidada. La novela no es fácil de leer, pero es una lectura que te hace pensar y que te obliga a cuestionar tus propias ideas preconcebidas.
«Cola Mala» es una novela indispensable para aquellos que buscan una lectura que sea a la vez emotiva, provocadora y divertida. Es una obra que merece ser celebrada por su valentía y por su originalidad. Cosío ha creado un personaje que te acompañará en tu memoria mucho tiempo después de haber terminado de leer la novela, y ha logrado crear una historia que te tocará el corazón. Recomiendo esta novela a todos aquellos que estén dispuestos a enfrentar las complejidades de la vida y a abrazar la diversidad y la inclusión.


