Chavales del arroyo, redactada en 1955, es la primera novela de Pasolini y es la mejor puerta de ingreso a su obra. Se trata de una excepcional crónica de la vida en los suburbios de Roma a lo largo de los años que siguieron a la Segunda Guerra Mundial, y es una pieza maestra tanto por sus aspectos etnográficos como por los puramente literarios que captura la atención desde la primera línea. Pasolini va retratando a personas cuyas vidas prosiguen una lógica periferica, extraña a las ilusiones tanto de las clases altas como del obrerismo clásico. Además, la fuerte mirada del que sería despues un gran cineasta recorre las casas y las calles de Roma, de manera que la ciudad es otro personaje, y fundamental, del libro. Por todo esto, Chavales del arroyo es una obra clave de la literatura del siglo xx y en ella están las mejores pretensiones del movimiento neorrealista italiano.