Última distribución de Bad Ash: al fin el desenlace mucho más aguardado.
Pasaron dos años desde esos días de verano en el lago Tahoe en los que todo acabó hecho trozos. Habituada a la nueva situación, Ashley ha aceptado que no volverá a ser aquella que desafinaba en un coche y le recordaba a un chaval que jamás se olvidase de sonreír.
La vida de Cam cambió de forma radical y hace mucho tiempo que dejó de dibujar corazones infinitos en otra piel. Lo último que desea en este momento es que el pasado vuelva para llevar a cabo reventar la calma.
Sin embargo, hay cosas que están destinadas a ser. Y personas que están destinadas a estar. Aunque no sea de la forma en la que siempre habían soñado. ¿Se puede reconstruir lo que un día se rompió? ¿Se puede regresar a sentir en el momento en que lo roto son dos corazones?