«Con la distribución de Arrebatos carnales III […] doy por concluida la trilogía que me permitió ver a contraluz la vida amorosa de ciertos individuos de la historia patria.»
Con esta obra, Francisco Martín Moreno da por concluida su Trilogía Erótica de México, acogida con justificado entusiasmo por el público lector.
¿Por qué razón oscura razón la historia oficial subió a los enormes personajes principales de nuestra historia a gigantes columnas de mármol blanco como si se tratase de figuras sacralizadas, santificadas, carentes de la menor pasión carnal? ¿Se trataba de proyectar la imagen impoluta de destacados actores de nuestro pasado o más bien ver su accionar en su más exquisita privacidad?
El autor, un acucioso estudioso de los hechos que definieron nuestra de hoy situación, descubrió el fuego, el idilio que consumía a Melchor Ocampo, uno de los progenitores de la Reforma en elsiglo xix; a Díaz Ordaz, el jefe del Ejecutivo que padeció los horrores del movimiento del 68; a Venustiano Carranza, uno de los supuestos inspiradores de la Constitución de 1917; a Felipe Carrillo Puerto, el enorme líder henequenero, feroz enemigo de la esclavitud yucateca; sin olvidar la configuración psicológica de un influyente inquisidor del siglo xvii en México.