Para Addie, lo único atrayente de ir a la boda de la excéntrica tía Mel es entender Irlanda junto con su familia. Fuera de eso, nada está bien en su corazón. Hay algo horrible que la tiene intensamente triste y que pone en juego su porvenir.
Como si no fuera sufisciente, Ian, su hermano mayor, conoce su misterio y no está dispuesto a dejarla en paz hasta el momento en que se lo cuente a su madre. En caso contrario, las discusiones entre ellos jamás tendrán fin y sólo la harán sentir aún mucho más miserable.
Cuando parece no haber trébol que cambie su suerte, Addie halla en los polvosos libreros del hotel una inusual guía de viaje, Irlanda para corazones rotos, y si bien ella es una escéptica, confía en que las cosas van a mejorar.
Las palabras de la guía hacen que Addie se embarque en una aventura llena de estudio y amor propio en la isla Esmeralda, donde descubrirá que la verdadera fuerza se encuentra dentro suyo y que sólo ella tiene el poder para sanar ese corazón que tanto le duele.