Mi nombre es Christopher y soy así como tú, o quizás sea todo lo contrario, quizás no nos parezcamos en nada, quizás no tengamos nada en común pero sin embargo, podemos ser realmente iguales y tener preguntas sin respuestas y búsquedas constantes, aunque creo que mejor no, creo que no me parezco a ti, amigo introvertido, transparente en multitud, dependiente a ser dependiente. Al final, poco importa a quién me parezco, ni tampoco quién soy. Lo que tienes en tus manos es mi diario y te está invitando a vivir adentro de un “TAL VEZ”, y enamorarte tanto para ignorarlo. La vida me la presentó para presentarme con ella las ganas de vivir. Todo empezó en el mes de mayo, pero no puedo decirte qué fecha es el día de hoy. Te invito a mi vida llena de excesos y diversión, te recomiendo un mundo en crisis, y a una vida de música, conciertos y poesía. Te invito a pasar, a que me sepas intensamente, a que me juzgues y a que me ames, quedando expuesto a futuras similitudes, a metáforas constantes y amor por ella, sobre todo eso, una loca historia amorosa sumergida en un imposible.