Este producto pertence a las radiografías mucho más agudas e irreverentes de la civilización de america de fin de siglo, en la que se mezclan la familiaridad, el desconcierto y una mordacidad desatinada.
Foster Wallace realiza enAlgo en teoría divertido que nunca volveré a hacer una postal gigantesca basada en su experiencia en un crucero de mucho lujo por el Caribe. Lo que a primera vista semeja ser un simple viaje «para relajarse», en manos de un humor delirante y un cinismo corrosivo terminará transformándose en el horror mucho más absoluto. Foster Wallace piensa sobre la presión para relajarse y disfrutar y cómo las indulgencias del viaje le llevan a una introspección autoflagelante.
La crítica dijo…
«La obra de no ficción mucho más brillante y entretenida que se escribió en los últimos tiempos.»
John Glassie, Time Out New York
«Animado por una prosa estupendamente exuberante […] este volumen asegura al señor Wallace como entre los talentos mucho más destacados de su generación.»
The New York Times
«Wallace escribe con una intensidad que convierte un reportaje errático en una forma sui generis de filosofía.»
Kirkus Reviews
«Su instinto para reproducir lo coloquial avergonzaría a maestros como Pynchon y DeLillo, y la sobriedad humana que otorga a sus temas, de ficción o de no ficción, habrían de ser un modelo para cualquiera que escriba crítica cultural, tanto en la manera de cuentos como en ensayos como estos.»
Publishers Weekly